Cuando se acerca la Navidad , te llenan el correo con felicitaciones ñoñas, mensajes al movil de esos impersonales , o llamadas de telefono de dos minutos , para no decir nada.
Yo os aconsejo que estas Navidades hagais mucho el amor y no la guerra
Y os dedico este relato
¡HACER EL AMOR EN NAVIDAD!
Cuando todo se impregna de espíritu navideño, ssin salir este año el tío de la calva, llegan los niños de San Idelfonso con la lotería, las calles se iluminan como si fuera “la feria de Sevilla”, la gente se vuelve loca para comprar marisco a altísimo precio...
A algunos se les quitan las ganas de “hacer el amor “
¡Que quieren que les diga!
Porque resulta, que todos absolutamente todos, nos volvemos buenísimos, excelentes e insuperables, aunque sigamos siendo,después de Reyes “ unos cabrones” o “unos hijos de puta”(con perdón de las cortesanas).
Nos invade “el mercantilismo”,y se nos “va la olla” comprando...
Comprar comida
Comprar regalos
Comprar amigos...
Comprar bondad
¡Y..una leche!
...De tan buenos, humanos, caritativos, compasivos... que nos parece que somos, hasta nos parece un pecado, ¡Dios me libre!, “Lo de hacer el amor”.
La culpa la tienen.. los Reyes Magos, Santa Claus, y hasta los renos que arrastran el trineo..
....
Y llegan las comidas familiares, y vuelven todos... hasta los “del turrón del Almendro” y las muñecas “de Famosa”,las viejas conversaciones, las pequeñas rencillas, las mismas cosas se repiten año trás año.. es como el anuncio de las burbujas “de Freixenet “, que “si no hay anuncio no hay Navidad.”
Y llegan las comidas de trabajo, la amiga invisible, las felicitaciones cursis, y las obligatorias llamadas de teléfono...
Y con tanto “curro” uno se olvida de hacer el amor
Y... ¿por qué?... me dirán ustedes
Por una sencilla razón..
Porque todos, absolutamente todos, están tan preocupados “por quedar bien”, por “el savoir fair”, por comprar esa lista de regalos que les han pedido sus hijos, por llenar sus mesas de abundantes manjares, aunque después se tire la mitad, por adornar las casas con el pesebre, con el árbol de navidad, y con las cintas en la lámpara del comedor o salita de estar y las bolitas de colores y ya de remate,por si fuera poco, también adaptamos costumbres que “son de fuera del país “, y ponemos en la puerta, una herradura, comemos el pavo, y cantamos villancicos..
Y eso cansa...
¡Joder!... si cansa
Y hacer el amor¡más!
Que con tanta pandereta, y tanta zambomba, a uno se le cansan las manitas... y hasta la garganta con tanto “villancico cutre “.
Con tanto turrón, tanto cava o champaña, y con tantos licores, uno después de la comida de Navidad, lo que le apetece es “dormir la mona”, o intentar que su estómago se siga dilatando para seguir comiendo..
...Y... de hacer el amor nada.
Y no digamos del “fin de año”, con tanta uva, que cuando llegas a la tercera ya estas atragantado, y cuando sale en “la Puerta del Sol”, en Madrid para los de fuera,” los ding dong de las campanadas”, y anuncia el nuevo año, después de atragantarnos con los cuartos... brindamos por el año nuevo, pensamos..
Joder otro año
Y a seguir pagando hipoteca
Y a hacer equilibrios para llegara fin de mes
Y nos abruman tanto esos pensamientos
Que...¡ de hacer el amor nada!
No dejándonos descansar, ni reponernos, de tanto “empacho”, en la televisión empiezan con “el séptimo de artillería”, a colocar anuncios sobre juguetes, que salen en la tele y parecen grandísimos, hermosísimos, colosalísimos... pero después son”una puta mierda”. Y... además muy caros..
Y las muñecas que cada vez hacen mas cosas... y las hay hasta reales.
Los niños, absortos en tales maravillas, cogen un boli y una libreta, y en los días de descanso entre Navidad y Reyes, se van apuntando todo lo que sale, así que cuando han de entregar la carta a los pajes de Melchor, Gaspar y Baltasar, tienen una lista más larga que el Mississipi
Y... los padres abnegados, ya no saben que excusa poner, porque cuentan los euros y se les han ido la mirad en gambas y turrón.
Se inventan entonces “miles de historia absurdas”, sobre que los reyes tiene “escasez de stock”, y que posiblemente se hayan acabado las existencias, o no les cabe más en los camellos por exceso de peso, o el trineo se ha roto una biela, o al reno no le arranca porque “pierde aceite”.
Y cuando llega la noche fatídica y todos ponen los zapatitos, en la chimenea, o en el balcón, a los padres se les hace”la picha un lío” porque no saben que decirles, de los juguetes que faltan en esa extensa lista, y encima se han de comer la comida que les dejaron para los camellos.
Y... de hacer el amor, nada
Encima no te ha tocado la lotería, habiéndote gastado “media paga extra” en los dichosos numeritos, que te ha soplado una vidente, o el frutero de la esquina que le han dicho que iba a tocar.
Y le has pasado el numero por un jorobado, que dicen que da suerte pero cuando ha llegado el día,... Piensas:
Joder, pero la lotería ¿a quien le toca?
Porque el décimo que compraste y que te dijo el frutero, la vidente y hasta tu prima que vive en Cuba, resulta que no aciertas ni un número y no tetoca ni “la pedrea o reintegro”
Y se te quitan las ganas de joder
Y de follar nada
Después , cuando ya han pasado las fiestas navideñas, has quitado el arbolito de navidad, el pesebre y hasta la herradura que has puesto en la puerta..
Piensas ..
¿Que me queda?
Pues..¡ Follar amigos!,¡ Follar que es gratis!, y encima te pone “el cuerpo como una jota”, y una sonrisa “de oreja a oreja”
Y aunque gasten municiones se reponen solas.
¡Que la suerte les acompañe!
Y buenas fiestas Navideñas
Besitos
Yo os aconsejo que estas Navidades hagais mucho el amor y no la guerra
Y os dedico este relato
¡HACER EL AMOR EN NAVIDAD!
Cuando todo se impregna de espíritu navideño, ssin salir este año el tío de la calva, llegan los niños de San Idelfonso con la lotería, las calles se iluminan como si fuera “la feria de Sevilla”, la gente se vuelve loca para comprar marisco a altísimo precio...
A algunos se les quitan las ganas de “hacer el amor “
¡Que quieren que les diga!
Porque resulta, que todos absolutamente todos, nos volvemos buenísimos, excelentes e insuperables, aunque sigamos siendo,después de Reyes “ unos cabrones” o “unos hijos de puta”(con perdón de las cortesanas).
Nos invade “el mercantilismo”,y se nos “va la olla” comprando...
Comprar comida
Comprar regalos
Comprar amigos...
Comprar bondad
¡Y..una leche!
...De tan buenos, humanos, caritativos, compasivos... que nos parece que somos, hasta nos parece un pecado, ¡Dios me libre!, “Lo de hacer el amor”.
La culpa la tienen.. los Reyes Magos, Santa Claus, y hasta los renos que arrastran el trineo..
....
Y llegan las comidas familiares, y vuelven todos... hasta los “del turrón del Almendro” y las muñecas “de Famosa”,las viejas conversaciones, las pequeñas rencillas, las mismas cosas se repiten año trás año.. es como el anuncio de las burbujas “de Freixenet “, que “si no hay anuncio no hay Navidad.”
Y llegan las comidas de trabajo, la amiga invisible, las felicitaciones cursis, y las obligatorias llamadas de teléfono...
Y con tanto “curro” uno se olvida de hacer el amor
Y... ¿por qué?... me dirán ustedes
Por una sencilla razón..
Porque todos, absolutamente todos, están tan preocupados “por quedar bien”, por “el savoir fair”, por comprar esa lista de regalos que les han pedido sus hijos, por llenar sus mesas de abundantes manjares, aunque después se tire la mitad, por adornar las casas con el pesebre, con el árbol de navidad, y con las cintas en la lámpara del comedor o salita de estar y las bolitas de colores y ya de remate,por si fuera poco, también adaptamos costumbres que “son de fuera del país “, y ponemos en la puerta, una herradura, comemos el pavo, y cantamos villancicos..
Y eso cansa...
¡Joder!... si cansa
Y hacer el amor¡más!
Que con tanta pandereta, y tanta zambomba, a uno se le cansan las manitas... y hasta la garganta con tanto “villancico cutre “.
Con tanto turrón, tanto cava o champaña, y con tantos licores, uno después de la comida de Navidad, lo que le apetece es “dormir la mona”, o intentar que su estómago se siga dilatando para seguir comiendo..
...Y... de hacer el amor nada.
Y no digamos del “fin de año”, con tanta uva, que cuando llegas a la tercera ya estas atragantado, y cuando sale en “la Puerta del Sol”, en Madrid para los de fuera,” los ding dong de las campanadas”, y anuncia el nuevo año, después de atragantarnos con los cuartos... brindamos por el año nuevo, pensamos..
Joder otro año
Y a seguir pagando hipoteca
Y a hacer equilibrios para llegara fin de mes
Y nos abruman tanto esos pensamientos
Que...¡ de hacer el amor nada!
No dejándonos descansar, ni reponernos, de tanto “empacho”, en la televisión empiezan con “el séptimo de artillería”, a colocar anuncios sobre juguetes, que salen en la tele y parecen grandísimos, hermosísimos, colosalísimos... pero después son”una puta mierda”. Y... además muy caros..
Y las muñecas que cada vez hacen mas cosas... y las hay hasta reales.
Los niños, absortos en tales maravillas, cogen un boli y una libreta, y en los días de descanso entre Navidad y Reyes, se van apuntando todo lo que sale, así que cuando han de entregar la carta a los pajes de Melchor, Gaspar y Baltasar, tienen una lista más larga que el Mississipi
Y... los padres abnegados, ya no saben que excusa poner, porque cuentan los euros y se les han ido la mirad en gambas y turrón.
Se inventan entonces “miles de historia absurdas”, sobre que los reyes tiene “escasez de stock”, y que posiblemente se hayan acabado las existencias, o no les cabe más en los camellos por exceso de peso, o el trineo se ha roto una biela, o al reno no le arranca porque “pierde aceite”.
Y cuando llega la noche fatídica y todos ponen los zapatitos, en la chimenea, o en el balcón, a los padres se les hace”la picha un lío” porque no saben que decirles, de los juguetes que faltan en esa extensa lista, y encima se han de comer la comida que les dejaron para los camellos.
Y... de hacer el amor, nada
Encima no te ha tocado la lotería, habiéndote gastado “media paga extra” en los dichosos numeritos, que te ha soplado una vidente, o el frutero de la esquina que le han dicho que iba a tocar.
Y le has pasado el numero por un jorobado, que dicen que da suerte pero cuando ha llegado el día,... Piensas:
Joder, pero la lotería ¿a quien le toca?
Porque el décimo que compraste y que te dijo el frutero, la vidente y hasta tu prima que vive en Cuba, resulta que no aciertas ni un número y no tetoca ni “la pedrea o reintegro”
Y se te quitan las ganas de joder
Y de follar nada
Después , cuando ya han pasado las fiestas navideñas, has quitado el arbolito de navidad, el pesebre y hasta la herradura que has puesto en la puerta..
Piensas ..
¿Que me queda?
Pues..¡ Follar amigos!,¡ Follar que es gratis!, y encima te pone “el cuerpo como una jota”, y una sonrisa “de oreja a oreja”
Y aunque gasten municiones se reponen solas.
¡Que la suerte les acompañe!
Y buenas fiestas Navideñas
Besitos
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