Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de agosto 12, 2007

SALIR DE NOCHE..."LA FIESTA VERANIEGA"

Imprescindible en cualquier veraneo que se precie es salir de noche de fiesta. Es como si las personas sufrieran una extraña metamorfosis cuando la luna hace su aparición, y es entonces cuando los rimeles, los carmines y los zapatos de tacón de aguja salieran de su encantamiento para dedicarse a adornar las figuras femeninas y también las masculinas haciendo posible que la noche se tiña de colorido de neón. Las personas se ven embriagadas de una especie de felicidad exultante que es ficticia, y que fenecerá cuando los primeros rayos de sol aparezcan y a medida que las copas vayan llenando las ilusiones. La noche en sí tiene su encanto especial, parece que las terrazas de verano, bares y discotecas, tiendas de souvenirs se vistan de luz y color para recibir a los fiesteros. Hay en esta denominación de origen bastantes tipologias que voy a intentar retratar en ese objetivo que tiene mi pluma virtual, y que no hace otra cosa que dibujar en las letras los que mis ojos, color miel por ciert

VIAJAR EN TREN"TODA UNA ODISEA"

Viajar en tren constituye una de las formas más cómodas para desplazarse de un lugar a otro… ¡es un decir! ¡Pero hay trenes y trenes! Los trenes formaban parte de las vacaciones familiares, era y antes que todo dios andarse encochado la forma de recorrer largas distancias. Era habitual que los trenes se denominasen según donde se dirigían , así se llamaba “El Sevillano” aquel mítico tren que tardaba dos días con sus noches en ver la Giralda y la Torre del Oro, y por el contrario “El Catalán” el que retornaba de tan andaluz destino , no diferenciando ninguna de las ciudades catalanas , ya que al parecer no existían ,y siendo el destino estrella Barcelona. Más tarde estas antiguallas de trenes de carbón pasaron a ser eléctricos tal y como hoy los conocemos. La flota trenera tuvo su auge en los años sesenta, siendo el novio de la época “El TALGO”. Trenecito con rojo y metalizado que recorría todos los viales de lado a lado de la piel de toro. ¡Tú…tú…! Se pusieron de moda entonces los regi