EL PADRE MANOLO Si ha existido un cura que me ha hecho creer en todo lo divino y lo humano ese ha sido el Padre Manolo. Apareció por el barrio de la SEAT, este capellán marianista cuando yo contaba unos trece años, si mal no recuerdo. Este hombretón norteño, de amplia sonrisa y de una candidez extrema nos encandiló a todos los preadolescentes que en esa época estábamos imbuidos en el espíritu de los scouts. En realidad, creo para ser sincera, que nosotros no teníamos ni idea ni quien era Baden Powell, ni lo que significaba todo ese movimiento. Para nosotros era otro tipo de actividad mas que nos permitía salir de excursión cada semana , vestirnos de uniforme marrón con camisa blanca , lucir un foulard y llevar un tótem con la cabeza de un animalito , que creo recordar era un ciervo . Fue entonces cuando nos renombramos dainas , aprendimos de memoria canciones en catalán , recorrimos casi todos los pueblos circundantes a Barcelona , hicimos la promesa , salimos cada verano ...